Durante el “Mensaje de unidad para la economía de Veracruz”, en el que participó a través de la plataforma Zoom, el presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), Gustavo de Hoyos Walther, hizo un llamado a nombre de las diferentes organizaciones empresariales para que en Veracruz fluya más el diálogo con las autoridades gubernamentales.
“Sabemos que, a diferencia de lo que existe en otras regiones del país, donde la comunicación con naturales diferencias es algo cotidiano, esa comunicación tiene todavía muchos caminos que recorrer en el caso de las autoridades del Gobierno del Estado de Veracruz”, indicó.
Al lado del presidente nacional de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco- Servytur), José Manuel López Campos, y del presidente nacional de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), José Enoch Castellanos Férez, refrendó la disposición permanente de los empresarios al diálogo, “en el disenso que es lo normal, en la diversidad que es lo que nos enriquece, pero siempre potenciando las posibilidades de interacción entre el sector privado organizado y las autoridades locales”.
Asimismo, el líder empresarial pidió al Gobierno de la República que se tomen cuanto antes medidas para tratar de que no se profundicen los efectos tan nocivos de esta crisis económica causada por el COVID-19.
“Nadie puede culpar a la administración federal ni a ninguna otra institución de que nos haya llegado esta crisis, pero lo cierto es que la falta de medidas o la falta de profundidad de las mismas, sí puede ser un detonante de que haya una mucho mayor mortandad empresarial y de que se esté exponenciando en nuestro país la pérdida de empleos”, consideró.
Recordó que, desde el mes de marzo de este año, la COPARMEX ha hecho continuos llamados al gobierno federal para que implemente los remedios solidarios. Esto es, tres propuestas de política pública:
Primero, la creación del salario solidario. Es decir, una participación del Gobierno en la nómina de las empresas de manera transitoria, solamente por cinco meses, cubriendo el 50 por ciento de la nómina, de tal manera que se asegure que, con esto, las empresas no tengan que liquidar personal ante la falta de flujo.
Segundo y haciendo eco de lo que han planteado muchas organizaciones sociales, incluso senadores y diputados de todas las fracciones parlamentarias, incluida la del partido en el Gobierno, que se apruebe el ingreso mínimo vital. Nuestra propuesta concreta es que durante seis meses aquellas personas que perdieron su empleo debido a la crisis puedan recibir un apoyo de cuando menos un salario mínimo, de tal manera que encuentren una condición de subsistencia en tanto logran emplearse nuevamente, lo cual hoy no es tan sencillo por las propias circunstancias económicas.
Tercero y último, le urge a este país que el Gobierno Federal implemente el bono solidario. Es decir, el apoyo de tres meses de salario para los trabajadores que se contraten, para los nuevos puestos de trabajo que se creen.
“Hay que decirlo con toda claridad, ningún programa social puede tener la profundidad, la eficacia o la permanencia de lo que se puede lograr a través de mantener los empleos que existen y sobre todo de apoyar la nueva creación de empleos”, expresó Gustavo de Hoyos.
Derivado de lo anterior, pidió al Gobierno de la República que no deje pasar más tiempo para implementar estos programas. Existen los recursos para ello, simplemente si se destinara el 15 por ciento de la línea permanente que se tiene contratada con el Fondo Monetario Internacional, por la cual ya se pagó una comisión, podría fondearse un programa de este calado.
“Me parece que esta crisis tiene muchas manifestaciones económicas, la forma más evidente es la pérdida de empleos, así como la mortandad de miles de microempresas, por lo que es tiempo de que el Gobierno se decida a actuar ya”, señaló.
Finalmente, refrendó su apoyo absoluto e incondicional a quienes tienen la representación de las delegaciones y cámaras empresariales locales de Canacintra, Concanaco y de Coparmex, así como a los que encabezan a las otras organizaciones pertenecientes al Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Daisy Aller
Trabajo realizado con el apoyo de: Journalism Emergency Relief Fundhttps://newsinitiative.withgoogle.com/journalism-emergency-relief-fund