De acuerdo con la Guía para organizar elecciones en tiempos de pandemia, preparada por el Departamento para la Cooperación y Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA), al organizar unos comicios como los que está preparando Veracruz para el año que viene, es necesario tomar en cuenta diversas medidas para evitar el contagio de COVID-19, lo que permitirá preservar la salud de los electores y garantizar el derecho de la ciudadanía a ejercer un voto seguro.

Lo anterior requerirá del compromiso del sistema político para resguardar la continuidad de los procesos democráticos, ya que también es necesario proteger a los funcionarios electorales y de otras instituciones del Estado y brindar las condiciones necesarias para que los partidos políticos participen en condiciones de equidad y transparencia, explica.

Asimismo, refiere que en estos tiempos la celebración de unas elecciones, al contemplar la participación masiva de ciudadanos, requiere de una planificación rigurosa que contemple las medidas sanitarias emitidas por el gobierno, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Para la OEA, el principal dilema que ha provocado la pandemia en materia electoral es celebrar o postergar las elecciones. Cada país adoptará esta definición en el ejercicio de su soberanía, pero el documento recomienda tomar en cuenta cuatro factores al tomar esta decisión: Condiciones de salud, marco jurídico, acuerdos políticos y fecha.

Es necesario “rediseñar la planificación de las elecciones con el objetivo de mitigar y reducir la propagación del coronavirus en las distintas etapas del proceso electoral, con especial atención en la jornada de elecciones. Se debe incorporar la visión técnica del sector salud y la evidencia científica, así como la experiencia y conocimiento del equipo de respuesta nacional a la pandemia de COVID-19, para adoptar las medidas que sean necesarias”.

En todas las actividades del proceso electoral se debe procurar mantener una distancia física entre las personas, procurar el lavado de mano frecuente con agua y jabón o soluciones alcohólicas, usar el estornudo de etiqueta y utilizar mascarilla. Además los recintos y productos electorales deben ser desinfectados usando productos a base de alcohol o cloro y se recomienda que las diferentes etapas del proceso electoral y las operaciones logísticas se lleven a cabo en espacios con buena ventilación.

El documento elaborado con la colaboración de la OPS, señala que los órganos electorales y los diversos actores del proceso deben contribuir a una planificación que permita evitar aglomeraciones, tanto en las etapas preparatorias como el día de la jornada electoral, y se deberán tomar medidas como la cancelación de eventos masivos, cierres o adecuación de los lugares de trabajo, restricciones al transporte público y el confinamiento generalizado de la población.

Para el organismo internacional, la multiplicidad de desafíos para organizar elecciones en tiempos de pandemia excede las competencias y capacidades de la autoridad electoral, por lo que “se requiere la coordinación con otras entidades gubernamentales para celebrar elecciones seguras”.

“Hoy más que nunca es importante que el órgano electoral informe adecuadamente, especialmente sobre las medidas que se adoptan para proteger la salud y permitir el desarrollo del proceso electoral, así como sobre los cambios en los procedimientos y en las reglas que regirán la contienda.”.

De esta manera, apunta, se evitará el pánico social producto de la movilidad que implica la organización de las elecciones y se permitirá a la población conocer los cuidados preventivos sanitarios en los centros de votación, los eventuales cambios logísticos y las disposiciones organizativas. “La incertidumbre y la falta de información puede ser uno de los peores enemigos para que la población acuda a votar”.

La Guía manifiesta que la pandemia puede afectar la ejecución de diversas etapas del proceso electoral. “Ante ello se deberán adoptar medidas o encontrar soluciones, para darle continuidad a la organización de la elección. Diversas propuestas requerirán modificaciones legales y es primordial que cada una de ellas se lleve a cabo conforme a los procesos legislativos correspondientes”.

Además, la celebración de elecciones en el contexto pandémico actual requerirá mayores recursos financieros para llevar a cabo las diversas medidas que garanticen la salud de los funcionarios electorales, de los electores y prevenir la transmisión del coronavirus en el marco de las actividades electorales, por lo que se requiere un compromiso financiero de parte de los Estados para brindar a los órganos electorales los recursos suficientes.

Las características de los diversos materiales electorales que serán utilizados en los comicios también deben de ser considerados para reducir el riesgo de contagio. En este caso, el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Organismo Público Local Electoral de Veracruz (OPLE) deberán considerar la inclusión de kits sanitarios con los insumos apropiados para los miembros de mesa, el diseño y producción de mobiliario que permita el distanciamiento físico y facilite la desinfección, el uso de la tinta indeleble y el material educativo en materia sanitaria que se debe desarrollar.

La OEA también recomienda explorar opciones para trasladar las gestiones presenciales de inscripción de partidos y candidaturas a plataformas digitales o modalidades que reduzcan la presencia física en oficinas del órgano electoral, para que se pueda presentar la información, los documentos, subir las fotografías y firmar digitalmente la solicitud, entre otros tramites.

“Explorar como alternativa el voto postal o el voto por internet para casos particulares, en atención a su condición de salud, puede ser una estrategia que le permita al Estado garantizar el sufragio de quienes de otra manera ponen en riesgo al resto de la población asistiendo presencialmente a votar, que probablemente estarán sujetos a medidas de aislamiento o cuarentena”, apunta.

“Al final, lo trascendental es definir si un país está en condiciones de llevar a cabo un proceso electoral en una fecha determinada, con base en la situación epidemiológica en que se encuentra. A partir de ello, deberá realizar todos los esfuerzos posibles para tener una elección justa, libre y transparente, y adoptar las medidas que sean necesarias para reducir la propagación del virus en el transcurso de todo el proceso y, particularmente, el día de la jornada electoral”, concluye la guía.


Trabajo realizado con el apoyo de: Journalism Emergency Relief Fundhttps://newsinitiative.withgoogle.com/journalism-emergency-relief-fund