Fabricantes “que reciban sublicencias, podrán ofrecer el nuevo medicamento en asociación con el ritonavir (utilizado contra el Sida)
Pfizer firmó un acuerdo de licencia voluntaria que debe permitir el acceso a su píldora antiCovid más allá de los países ricos una vez que haya sido autorizada, anunciaron el martes el gigante farmacéutico estadounidense y la organización Medicines Patent Pool (MPP).
Los fabricantes de medicamentos genéricos “que reciban sublicencias, podrán ofrecer el nuevo medicamento en asociación con el ritonavir (utilizado contra el virus del sida) en 95 países, que cubren cerca del 53% de la población mundial”, precisó un portavoz de Unitaid, que creó MPP, durante un encuentro con la prensa de la ONU en Ginebra.
A principios de noviembre, Pfizer, que ya comercializa con el grupo alemán BioNTech una de las vacunas más eficaces contra el COVID-19, indicó que su antiviral oral PF-07321332 tenía una eficacia del 89% para prevenir una hospitalización o deceso entre los adultos que presentan un riesgo elevado de desarrollar una forma grave de la enfermedad, según resultados intermedios de ensayos clínico.
Con este acuerdo, Pfizer avanza en la misma senda que su competidor Merck, que selló un pacto similar con MPP para su propio anticovid oral, el molnupiravir, que exhibe también una fuerte tasa de eficacia.
Estos resultados prometedores aún deben ser confirmados, subrayó Esteban Burrone, responsable de la elaboración de políticas de MPP, en una entrevista con la AFP. Pero si se validan, la disponibilidad “será una cuestión de meses y no de años”, aseguró.
Aunque ya existen tratamientos -principalmente en forma de anticuerpos sintéticos- son fármacos para pacientes que ya padecen formas graves de la enfermedad y que se inyectan por vía intravenosa y por tanto son complejos de administrar.
Por el contrario, una píldora o un comprimido puede recetarse rápidamente al paciente, que puede tomarlo fácilmente en casa.
Los tratamientos de Merck y Pfizer, que también tendrían pocos efectos secundarios, prevén diez dosis durante cinco días.
En paralelo, un antidepresivo que ya está en el dominio público, la fluvoxamina, mostró resultados alentadores en la prevención de las formas graves de COVID-19, según un estudio publicado en octubre por investigadores brasileños en la revista Lancet Global Health.