El confinamiento de más de tres meses, la presión económica y cuestiones colaterales, emocionales, como los abusos dentro de la familia, ha obligado a muchas personas a salir a la calle a buscar el sustento y eso ha generado una gran ola de contagios de COVID-19 en Córdoba y la región, así lo considera el ingeniero Guillermo Rivas Díaz.
El exalcalde priista de Córdoba, hombre de negocios en la zona centro del Estado, con más de mil empleados dentro de sus empresas, dice que Córdoba está viviendo “un momento crítico”, ocupando el tercer lugar estatal en número de contagios, con 856 positivos confirmados; 70 defunciones y 249 sospechosos, según las cifras de la Secretaría de Salud de este domingo 12 de julio de 2020.
Sin embargo, el hombre que se formó como ingeniero industrial en la Universidad de Dayton, en Ohio y que cuenta con una Maestría en la Universidad de Massachusetts, ve las cosas con optimismo y confía en que Córdoba, Veracruz y México saldrán adelante, “porque somos más grandes que todos estos problemas”.
“Yo quiero decir que todos debemos apoyar a nuestra comunidad. Nosotros somos parte de la solución. La solución tiene que venir no de los empresarios, sino de todos los ciudadanos, manteniendo las reglas de sanidad, lavarse las manos, usar cubrebocas, mantener la sana distancia pero también consumiendo lo de nuestra localidad, evitar en lo máximo posible salir a comprar cosas fuera, consumir lo que nuestra ciudad produce”, indica.
“En estos días uno no puede ir a la peluquería, ejemplifica pero el peluquero llama y nos dice: ‘yo puedo ir a tu casa’. Pues ven, le contestamos. Ese tipo de pequeños esfuerzos o pequeñas cosas van a hacer muy importantes para superar esta situación. La sociedad civil en cada ciudad debe tomar la iniciativa y tratar de superar esta situación”.
El ingeniero Rivas, quien trabajó en Estados Unidos para compañías como Ingersoll Rand, Sundstrand Corporation y Byron Jackson, considera que el llamado a la sociedad civil es fundamental para superar cualquier crisis pero también la solidaridad.
“Una de las experiencias que tuve en Estados Unidos y que no les está ayudando mucho es el individualismo. Este individualismo los está llevando a una gran contaminación. Aquí sí hay pero yo creo que es el momento de hacer a un lado el individualismo y solidarizarnos”.
“Yo creo que nosotros los mexicanos esto lo hacemos muy bien, ver por nuestro prójimo, ver por nuestro vecino, ver por nuestra comunidad. Yo en estos momentos no quiero enumerar las cosas que hago, porque no se trata de ensalzarme pero en la medida que he podido no nada más veo por la gente que trabaja en mis empresas sino por mis conciudadanos de Córdoba”.
—¿Córdoba saldrá adelante?
“Córdoba va a salir adelante, Veracruz saldrá adelante y México saldrá adelante. Somos más grandes que los problemas y si nos solidarizamos, definitivamente vamos a salir bien y pronto”.
Guillermo Rivas Díaz, quien fue consultor durante 4 años en McKinsey y Compañía en la Ciudad de México; director general de Cementos Veracruz y empresario de las industrias de Transporte, Plásticos, Bienes Raíces y Agencias Automotrices, pide a los cordobeses que mantengan las medidas, que no pierdan la esperanza, que no se torturen, “vamos a salir adelante, vamos a solidarizarnos y vamos a tener mejores días”, comenta.
El hombre que es recordado en Córdoba por su gestión como Alcalde Suplente en el 2013, marcada por una administración eficiente de los recursos y en la cual donó su sueldo, insiste en que hay que estar preparados, porque “estamos en una situación crítica que va durar no sólo varios días sino varias semanas más”.
Empresas, sin fondos de emergencia
Comenta que desde que el Gobierno definió el rubro de empresas esenciales y no esenciales, sus empresas acataron las reglas.
“En las no esenciales mandamos a todo mundo a su casa y pedimos que quienes pudieran trabajar desde su casa por vía internet, lo hicieran. No todos los puestos pueden hacerlo y descubrimos tristemente que algunas de nuestras gentes no tienen internet ni computadora y los hemos apoyado con ambas cosas”.
“Luego, hay otras empresas nuestras que fueron declaradas esenciales y los primeros, yo diría, 45-50 días, implementamos las medidas y mandamos a sus casas a aquellas personas vulnerables por edad, por peso, por una serie de problemas de salud”.
“Fue lo primero que hicimos y empezamos a instalar medidas de sana distancia y protección de un lugar a otro”, refiere.
El empresario comenta que a todo su personal se le ha insistido en las medidas que deben tomar para no generar contagios, sin embargo, considera que “por más que nosotros hagamos dentro de la empresa, no controlamos lo que la gente hace cuando se va a su hogar. Ese es el problema”.
“Hay personas que viven o residen muchos en una pequeña vivienda o salen a celebrar o se contagian los fines de semana. Esa es la parte que nosotros no podemos controlar. Lo que sí hemos hecho, los hemos reunido y les hemos hecho gran énfasis en las medidas de protección que tienen que tomar, no nada más en la empresa, sino fuera de la empresa. Hasta donde hemos podido, hemos exhortado a la gente a no salir, a usar máscaras, a lavarse las manos, a guardar la sana distancia y hasta ahí todo lo que podemos hacer”.
El empresario cordobés comenta que a todas las personas que ha enviado a su casa les ha seguido pagando su salario puntualmente, hasta ahora, porque también los recursos no son infinitos.
Considera que casi ninguna empresa tiene fondo de emergencia, así que tienen que sacar de sus ahorros para poder subsistir.
Ventas, al 40 por ciento
Dueño de empresas automotrices, en el puerto de Veracruz, Poza Rica, Córdoba, Orizaba y Tuxtepec y de un negocio de plásticos que fue definido como empresa esencial, porque hacen envases para la industria alimenticia, el ingeniero Rivas comenta que en el caso de la venta de vehículos, sus trabajadores han tenido que innovar.
“Lo que sí ha sido sorprendente para nosotros es que nuestros vendedores que tienen un salario base pero que su fuerte son las comisiones, han logrado, por medio de teléfonos, internet o videollamadas, hacer ventas. Por supuesto, no las que se hacían normalmente pero tengo que manifestar que han hecho una excelente labor para la empresa y para ellos. Seguimos vendiendo, en el mejor de los casos, el 40 por ciento de lo que vendíamos antes. Así de mal estamos”.
“Pero pasamos de no vender nada, que eso nos pasó el primer mes, que no nos habíamos enfilado a ese tipo de ventas, que vendimos el 10 por ciento, a este 40 por ciento”.
Rivas Díaz expresa que cada negocio ha tenido diferentes estrategias para superar esta situación que no veo que termine antes de septiembre. “Mejor ya no digo fechas, no me vaya a pasar como algunas personas a nivel gobierno que decimos fechas y nunca suceden”.
Añade que, afortunadamente, su empresa ha podido sostener la plantilla laboral que fluctúa arriba de las mil personas.
“Tenemos más de mil personas en los negocios en los que estoy y esperamos seguir así, manteniendo la nómina pero sobre todo, manteniendo todas las medidas para que no haya infección hasta donde sea posible”.
Respecto a los datos del Consejo Coordinador Empresarial de la región que ha informado de 14 mil desempleados y 161 empresas cerradas, el empresario dijo que muchas veces son empresas pequeñas que pasan desapercibidas.
“La cuestión de restaurantes, gimnasios, bares, centros de entretenimiento, definitivamente algunos ya no van a volver a abrir. No pueden aguantar esta situación tan difícil”, concluye.
Trabajo realizado con el apoyo de: Journalism Emergency Relief Fundhttps://newsinitiative.withgoogle.com/journalism-emergency-relief-fund/