Con las líneas telefónicas de atención a COVID-19 que resultan un “vacilada”, con los hospitales saturados, con médicos que no quieren ir a tu casa —por obvias razones—, con desabasto de medicamentos e insumos en farmacias y con tanques de oxígeno a precio de oro, así enfrentan los xalapeños la pandemia de esta enfermedad que al lunes 20 de julio contaba, con “datos oficiales”, 923 casos positivos confirmados, 98 defunciones y 164 sospechosos.
La triste realidad es que los capitalinos han tenido que enfrentar solos y en sus casas esta pandemia. Los que pueden pagarlas, se hacen pruebas en laboratorios privados para atender con rapidez a sus enfermos. Los que no, tienen que usar remedios caseros, aguantar y si van al hospital, saben que el riesgo de morir aumenta.
La noche de este lunes, a través de Facebook Live, el xalapeño José Luis Palafox Mariscal narró las peripecias que ha vivido en los últimos días para atender la salud de su madre, afectada por COVID-19. Lo hace, aclara enfático, “para que tomen todos consciencia, para que se lo tomen en serio”.
“Yo supongo que la mayoría tiene pocos conocidos o pocos familiares y qué bueno que así sigan, que pasen esta pandemia sin ningún familiar enfermo o ustedes mismo que jamás se enfermen pero bueno, a mí ya me pasó, en el caso de mi madre y no tienen idea de la angustia que se vive día con día con todo esto”.
“Así que por favor, en la medida de lo posible quédense en casa, no asistan a reuniones. Si salen, extremen todas las precauciones, que el cubrebocas, que la careta, que el gel, que lavarse las manos, todo”.
Mensaje “conciso y macizo”
José Luis Palafox Mariscal contó que desde hace como 15 días su madre empezó a tener síntomas parecidos a los del COVID.
Aquí la narración íntegra:
“Empezó con calentura, malestar generalizado y muchos problemitas de ese estilo. Mi madre tiene 69 años, por lo que es población de riesgo. Se contagió. Lo ha de haber agarrado en cualquier lado”.
“Aquí empezó el vía crucis. No se lo toma uno tan en serio hasta que te pasa. Voy a tratar de relatarles. Mi mamá aún no está bien. Sigue estando delicadita. Sus signos vitales estables, estable. Sí se la está viendo difícil”.
“Todo comenzó hace 15 días, que empezó con síntomas. Parecía que era infección. Llamó a los teléfonos del Sector Salud, donde te hacen una entrevista y te dicen si vas al hospital. Desde ahí empezó el problema”.
“Le dijeron que no era COVID, que era una infección en la garganta o en vías urinarias, que viera al doctor y siguiera el tratamiento pero que no era COVID”.
“Eso le da a uno tranquilidad porque piensas que la gente que te está contestando del otro lado se lo toma en serio y el problema es que no”.
“Mi mamá, un día después se siguió sintiendo mal, empeoró, volvió a llamar y le volvieron a decir que no tenía COVID. No le dieron ninguna recomendación de ir a un hospital ni nada por el estilo”.
“Creo que ahí no coincido con la estrategia del Gobierno Federal y para todos mis amigos que son seguidores de AMLO, que son varios, créanme que nadie me está pagando nada por echarle lumbre pero creo, pienso, que el tema de los tests es sumamente importante”.
“Vemos al Subsecretario Gatell diciendo que lo que dice la OMS de test, test, test no tiene sustento científico y no es adecuado, perdóneme pero no. Estoy de acuerdo que no se debe hacer test a toda la población pero si una persona es sospechosa de COVID o tiene síntomas, tienen que hacerle la prueba y las pruebas no se están realizando. El Sector Salud no las está realizando”.
“Entonces, eso te hace perder tiempo como enfermo o como familiar de un enfermo. Estás perdiendo tiempo y en esta enfermedad el tiempo vale oro”.
“¿Qué pasó con lo que hicimos nosotros? Vimos a un médico particular, a un internista. Le hicimos una prueba particular, que como sabes están escasas y caras, muy caras y resultó positiva, después de hablar dos veces al 01 800 del Sector Salud y que le dijeron que no era COVID y que no era necesario correr a un hospital”.
“Perdimos tiempo muy valioso y al final resultó que sí era COVID por estos análisis que le hicimos de forma particular”.
“Aquí, lo muy delicado del tema es que, gracias a Dios, nosotros tuvimos la posibilidad financiera de hacerle una prueba de COVID pero para muchísimas personas en este país ese es un verdadero lujo, que muchas veces es imposible que lo hagan”.
“Entonces, de ahí tache para el Sector Salud, tache para la estrategia de la federación”.
“No está bien que hables por teléfono y que de alguna forma menosprecien tu padecimiento y que te digan que no tienes COVID. Así, a la ligera y obviamente como enfermo o como familiar de un enfermo, te dicen lo que tú quieres oír, que no tienes COVID”.
“Eso es lo que te dicen, eso pone más en peligro al enfermo y a los que rodeamos al enfermo”.
“Porque otra de las peores cosas que tiene esta enfermedad es que no encuentra un doctor que quiera ir a tu casa, por obvias razones”.
“Y como te dicen que no es COVID, como que le entras con más confianza. Todos en la familia estamos confinados, porque de una u otra manera convivimos con nuestro enfermo, que en este caso es mi mamá”.
“Porque nadie la va a cuidar. Nadie va a ir a tu casa a arriesgar el pellejo más que la propia familia y no te queda de otra más que entrarle al tema”.
“Por otro lado, en Xalapa, aunque los números no lo digan así, los números oficiales, la realidad es que los hospitales están saturados, al menos lo que es el CEM y lo que es el ISSSTE no cabe una persona más, entonces, ojo con eso, tómenselo en serio, porque cuando dicen voy al hospital, no hay forma de ir, están llenos los hospitales”.
“Entonces tienes que buscar la forma de con tus medios solucionar el problema”.
“¿Que hicimos con mi mamá? Fuimos con este doctor, sale positivo y empieza el tratamiento y empieza el ‘jelengue’ y te topas con muchísimas cosas que verdaderamente son muy graves, como es el desabasto de medicamentos e insumos para el tratamiento de una persona con COVID”.
“Todas las medicinas recomendadas para este padecimiento, los invito, los reto a que los busquen en una farmacia, no hay. Y cuando hay, es carísimo”.
“Una herramienta para una persona con COVID y más con la edad de mi madre, que tiene 69 años, es el oxígeno, porque su saturación empieza a bajar”.
“Bueno, esa es la parte más grave que les quiero comentar: nosotros comenzamos con el vía crucis del oxígeno desde el sábado en la mañana en Xalapa y en ningún lado hay oxígeno”.
“Lo único que te ofrecen son recargas. Los pocos tanques que llegas a encontrar te los venden a precio de oro, alrededor de 15 o 18 mil pesos. Y bueno, es un tremendo vÍa crucis encontrar el mentado tanque de oxígeno”.
“Nosotros, gracias a Dios, tuvimos la fortuna, luego de que publiqué algunas cosas en Facebook y gracias a amigas y amigos que se sumaron a ayudarme a buscar, una amiga Alma Miranda, a la cual le agradezco infinitamente, me ayudó a encontrar un tanque de oxígeno en Perote y ahí vamos”.
“Antes de eso, un amigo, Bernardo Bellizia, me prestó un tanque de oxígeno chiquito, de esos que usan para las ambulancias, que de alguna forma nos sirvió muchísimo porque aunque no duran casi, sí me dio el chance de irlo a cargar, llevarlo con mi mamá y que me diera tiempo de conseguir las demás cosas”.
“Con ese tanque chiquito ahí lo fuimos dosificando en muy pocas cantidades para mi mamá, para que se fuera llenando, en lo que conseguíamos las cosas”.
“Ya con el tanquecito de oxígeno, mi mamá ya tenía oxígeno, me fui a Perote y gracias a esta amiga, Alma Miranda, encuentro el tanque allá y vengo para Xalapa con el tanque y la segunda sorpresa con el tanque, que de por sí es muy trabajoso conseguirlo, pues necesitas el barómetro o la válvula que le llaman, que es un vasito que lleva ahí junto, que es agua destilada, bueno, pues esos accesorios es imposibles encontrarlos”.
“Hablas a donde quieras hablar y no hay nada”.
“Es un equipo cuyo precio regular es de 900 pesos y nosotros pudimos encontrar uno en Xalapa que nos estaban vendiendo en 5 mil pesos”.
“Eso también se me hace totalmente inhumano, que la gente que tiene este tipo de cosas, distribuidores, vendedores, etcétera, se aprovechen de esta necesidad que hay en la gente, para vender”.
“Están tan caros esos insumos, es un precio excesivo, que muchas veces no estás preparado para poder pagar”.
“Repito, gracias a Dios pudimos conseguir absolutamente todo, hoy en la mañana mi mamá que se acabó el tanque de oxígeno chiquito ya habíamos conseguido el barómetro, también gracias a un amigo, Josué Guerrero, a quien le agradezco profundamente el cómo se ha solidarizado conmigo y con esta causa para poder conseguir las piezas para que mi mamá hoy ya tenga un tanque de oxígeno grande, de esos que sí duran y pueda estar atendiendo su padecimiento”.
“Le agradezco a Hamton, que me ayudó con un tratamiento alternativo para lo de mi mamá”.
“Así mucha gente que se ha solidarizado, que te recomiendan medicina”.
“La doctora Dulce, una amiga de la primaria que es geriatra, que está viendo a mi mamá, mucha gente que se asoma, que se agradece profundamente, desde el fondo del corazón”.
“Pero créanme, lo del oxígeno es bien difícil de conseguir”.
“Es bien difícil tratar a un paciente en casa y con esto a qué voy, a que se cuiden y que realmente se lo tomen en serio”.
“Nosotros somos unas personas que relativamente nos cuidábamos y digo relativamente, porque estábamos en confinamiento y todo pero sí llegamos a caer en esas falsas confianzas que te da: bueno, me invitaron a una comida en casa de un pariente que ellos se cuidan, yo me cuido y podemos ir y vamos y la pasamos bien pero realmente te estás arriesgando demasiado”.
“En mi caso, aprendimos a la mala que ni siquiera eso se debe de hacer”.
“Hoy día ya lo ves en redes y todo pero creo que te cae el 20 hasta que cae el primero en tu familia y al menos ahorita en nuestro caso, está muy complicado porque en casa de mi mamá vive mi hermana con su esposo, sus dos hijos, la hija de mi hermana ya tiene COVID pero obviamente es una niña de 14 años, a la cual le va muy bien con el tratamiento, le está yendo muy bien, por su edad”.
“En el caso de nosotros, los ‘chavorrucos’ de mi edad, ya estamos en población casi de riesgo, alrededor de los 40 y ya no es lo mismo”.
“Como les decía, tienes que agarrar el toro por los cuernos y aunque sea peligroso ir a ver a tu familiar tienes que hacerlo, porque tienes que llevarle insumos, por ejemplo, el oxígeno, que la manguerita, que la manguerota, que la medicina, que andar buscando la medicina por todo Xalapa, hablar a todas las farmacias de Xalapa y ver que los medicamentos están agotados, verdaderamente es un vía crucis tener un familiar con COVID”.
“El caso de mi madre bueno pues está estable, está delicada pero está estable, todavía no vemos un rumbo, una franca mejoría, todavía no pero al menos está estable y bueno, eso ya es ganancia. Está respirando por sí misma, está oxigenando medianamente bien y bueno pues ahí la vamos llevando”.
“Pero sí quiero que sirva esta transmisión de FB live para que tomen todos conciencia, se lo tomen todos en serio”.
“Yo supongo que la mayoría tiene pocos conocidos o pocos familiares y qué bueno que así sigan, que pasen esta pandemia sin ningún familiar enfermo o ustedes mismo que jamás se enfermen pero bueno, a mí ya me pasó, lo repito, en el caso de mi madre y no tienen idea de la angustia que se vive día con día con todo esto”.
“Así que por favor, en la medida de lo posible quédense en casa, no asistan a reuniones. Si salen, extremen todas las precauciones, que el cubrebocas, que la careta, que el gel, que lavarse las manos, todo”.
“Y de verdad, que el tema de las pruebas, que debe de implementar el Gobierno, debe implementar pruebas gratis, para todas las personas sospechosas, sí debería de ser”.
“La OMS no creo que esté equivocada o que esté llena de gente tonta, que esté recomendando, como lo hemos visto en los noticieros, que esté recomendando tests, tests, tests”.
“Es muy importante que la gente sospechosa sea diagnosticada oportunamente, eficazmente y a tiempo”.
“Porque esa vacilada de que hablas por teléfono y te dicen que no tienes COVID, es efectivamente una vacilada”.
“Y por eso hay tanta gente muriendo. Por eso, hasta la semana pasada estábamos cerca de las 40 mil defunciones, cosa que es algo de lo que nos podamos sentir orgullosos pero gran parte de las defunciones es por gente que no diagnosticaron correctamente y que no diagnosticaron a tiempo y que simple y sencillamente la están dejando morir, ser estadística”.
“Y repito, hay muchísima gente que no va a poder pagar una prueba de COVID”.
“Repito, gracias a Dios nosotros pudimos hacerlo pero estoy seguro que mucha gente no tiene esos recursos y a esa gente es a la que tiene que apoyar el Gobierno y que a cualquier sospechoso tiene que hacerle la prueba para ser diagnosticado a tiempo”.
“Ojalá les sirva mi experiencia en este tema. Cuídense mucho. Cuídense mucho. Quédense en casa y tomen todas las precauciones”, concluye José Luis Palafox Mariscal.
Miguel Valera
Trabajo realizado con el apoyo de: Journalism Emergency Relief Fund https://newsinitiative.withgoogle.com/journalism-emergency-relief-fund