Al señalar que la “nueva normalidad” es una consideración compleja, que se ha utilizado para referir el cambio en ciertos patrones, el epidemiólogo  Mauricio Fidel Mendoza González aseguró que en esta transición tendremos que aprender a vivir en una nueva cultura de prevención de riesgos, para evitar complicaciones en la salud personal y comunitaria.

“Al final de cuentas, añade el especialista, estaremos ante dos situaciones ahorita que regresemos. Hay que evitar contagiar y contagiarse. Es una situación sumamente importante”, destaca. “No estamos pasando a una nueva normalidad, sino en la misma condición, en la que tendremos que aprender a vivir acorde a esta situación”.

Dijo que se ha hablado a nivel nacional de “nueva normalidad” y se han implementado un semáforo rojo, amarillo y verde, pero que esta estrategia aplica para cada región de una manera diferente.

“Aquí en Veracruz, el municipio de Veracruz y la zona conurbada ha sido el espacio, el lugar a donde llegó la enfermedad. De ahí se ha ido diseminando a lo largo y ancho del estado. La federación establece un criterio de toma de decisiones con respecto a lo que recomienda para el país, pero corresponde a los gobiernos locales, a las autoridades sanitarias locales, a la academia, a la gente que está involucrada con esto, a analizar de manera muy detallada justamente dónde, de qué manera, en qué momento es el más adecuado en donde se pueden empezar a hacer las acciones de desconfinamiento para poderse incorporar a las actividades sustanciales. Eso sí es muy importante”.

“Porque una cosa es reincorporarse a la actividad sustancial, que puede ser económica, laboral, de funciones muy importantes y la otra cosa es que la gente hoy ha soltado un poco la responsabilidad y vemos que salen normalmente a la calle y ahí sí hay una pérdida total de las medidas de prevención. Ese sería el problema más grande”.

Para el doctor Mauricio Fidel Mendoza González una situación como esta debería ser muy importante analizar lo que ha pasado en otros países y aprender de los errores.

“Hemos visto en algunos países cómo adelantaron el confinamiento social y entonces de repente vimos salida de gente y reinfecciones o la transmisión nuevamente y esta es una lógica biológica de la enfermedad. Si yo soy vulnerable a la enfermedad, si yo soy susceptible, salgo al exterior y en el exterior hay enfermos, lo más lógico es que me voy a infectar”.

“Ese es otro problema, la movilidad urbana se está incrementando. Y eso quiere decir que la gente perdió el control en ese sentido y está saliendo a hacer su vida rutinaria”.

Finalmente, se muestra a favor de ciertas medidas implementadas por la autoridad, como la “Ley seca”, pero se muestra a favor de evaluarlas en lo particular y en las conurbaciones.

“No hay mejor conocimiento de la manera en que se comportan las conurbaciones que los alcaldes, las autoridades que son parte de todo este espacio conurbada y sí es posible que algunas medidas de restricción, que puede estimular la concentración social, pudieran ayudar. Yo creo que valdría la pena que las autoridades lo pudieran limitar. Sin embargo, sí parecería que ciertas medidas como esa pudiera generar en el común de la población ciertos comportamientos restrictivos hacia la convivencia social”, concluyó.


Carla Mendoza

Trabajo realizado con el apoyo de: Journalism Emergency Relief Fundhttps://newsinitiative.withgoogle.com/journalism-emergency-relief-fund